

Mi Jornada Contra El Cáncer- Todo Comenzó En Perú
Mi Jornada Contra El Cáncer. Al igual que la mayoría de la gente, no vi el cáncer tocar a mi puerta en absoluto. De hecho, no tenía ningún síntoma que causara alguna preocupación. No tenía problemas de salud, más que el común denominador de la gente, un resfriado, por ejemplo; así que pensé que no había nada malo. Debo añadir a ello, el hecho de que mi esposo es profesional en Medicina, así que tener una enfermedad como el cáncer, parecía aún más irónico.
Este jornada contra el cáncer comenzó durante unas largas vacaciones familiares. En junio del 2014 mi esposo y yo decidimos viajar a Perú con nuestros tres hijos para visitar a la familia. En ese momento, nuestros hijos varones, mellizos, tenían once años, y nuestra hija tenía tan solo cuatro. Habíamos esperado este viaje por bastante tiempo.
Nos quedamos con mi padre, quien se colocó como consigna, ayudarme a tratar un problema con el que había lidiado durante años: mi acné. «Veo que todavía tienes acné», dijo. “¿Por qué no intentamos tener una cita con un dermatólogo mientras estás aquí?”
Por supuesto, ver a un dermatólogo a causa de mi acné, no era para nada una prioridad en mi vida, especialmente, en un país del tercer mundo. Como le expliqué a mi padre, ya había visto varios dermatólogos en Estados Unidos; y los antibióticos y cremas que me prescribieron no funcionaron; así que, pensé que solo tenía que vivir con esto. Había decidido que, tener acné a mis 41 años, no era el fin del mundo.
Pero mi padre era insistente, así que cedí para hacerlo contentarlo. Dos días después, fui a mi cita.
El dermatólogo consideró que mi problema de acné podría ser hormonal, por lo que recomendó que vea a un endocrinólogo. La endocrinóloga pudo verme luego de unos pocos días. Ella leyó mi historia y me indicó un análisis de sangre; posteriormente, comenzó a examinarme físicamente. Cuando examinó mi cuello no estuvo contenta con lo que encontró.
«Siento un nudo», dijo. “¿Lo has sentido?”
Luego empezó a preguntarme acerca de posibles síntomas. No recuerdo muy bien la lista que mencionó, pero me reí cuando me preguntó acerca de la fatiga. “¿Fatiga?” dije. «¡Sí, tengo tres hijos! ¿Cómo no estar cansada?”
Pero la endocrinóloga estaba muy preocupada por este bulto. «Te sugiero que hagas un ultrasonido aquí mismo, de inmediato», dijo.
Cuando volví esa tarde para la ecografía no me preocupé, estaba segura de que no era nada. Me acosté sobre la camilla en la sala de ultrasonido y me relajé. A diferencia de los Estados Unidos, donde las imágenes de ultrasonido son tomadas por técnicos y luego revisadas por radiólogos, en el Perú el radiólogo realiza el ultrasonido y revisa las imágenes en tiempo real.

Jornada Contra El Cáncer
Estaba acostada observando al médico cuando de repente, vi sus ojos muy abiertos. De hecho, vi miedo en sus ojos. «Necesitas una biopsia de inmediato», dijo. Mi corazón empezó a saltar. ¿Qué estaba pasando? El radiólogo dijo que el bulto era algo preocupante. ¡Estaba aterrada!
Recuerdo haberme encerrado en un cuarto de baño de Starbucks. Sí, había un Starbucks en esta pequeña ciudad en el norte del Perú. Clamé a Dios preguntándole: ¿por qué aquí?, ¿qué estaba pasando?, ¿cómo y por qué me llevaría a encontrar algo tan serio en Perú?, ¿cómo podría pasar esto?
En ese momento, supe que tenía dos opciones: Podría estar desesperadamente ansiosa; o podría dar todo de mí, y confiar en que de alguna manera, todo saldría bien. Mi familia y yo teníamos tres semanas para disfrutar nuestro viaje, así que decidí dejar de lado todo el miedo, las emociones y las preguntas para concentrarme en disfrutar el tiempo en familia como estaba planeado desde un principio; y dejar todo esto para cuando lleguemos a casa.
Jornada Contra El Cáncer
“Me libero de todos los pensamientos ansiosos y pongo mi confianza en la alineación con la luz que brilla en mí”
Hola
Soy Karen!
He encontrado que mi caminar con cáncer es una experiencia positiva, profunda y transformadora. Me siento inspirada en compartir con ustedes, mi viaje de sanación aquí; y confío en que encontrarás esperanza, aliento y propósito a medida que descubras el poder curativo que vive dentro de ti.
¡Únete
a nuestro boletín!
By signing up for my newsletter, you agree with our Privacy Policy and Terms & Conditions.